Tres Palabras Claves: lectura, pensamiento, escritura, hicieron posible el desarrollo de la raza humana. Una mirada al pasado nos confirma como seres humanos porque pensamos, leemos, escribimos, porque tenemos lenguaje. Sin ellos, no habría historia. La anterior, muy breve pero incontrovertible reflexión, me permite replantear el cómo de la educación, nuestra educación, la formación de nuestros niños y de los jóvenes de este país. Los maestros y los padres de Familia responsables de la tarea más noble de la humanidad. Tenemos hoy la responsabilidad social de cuestionar los resultados de las tradiciones y costumbres escolares. Esa cultura de nuestras escuelas, por largo tiempo recicladora, repetitiva, ausente de la historia de nuestro país, es ignorante de esa suerte de realidad sociocultural "virtual” en donde la tecnología y la ciencia avanzan sin mirar quiénes se quedan atrás haciendo que los espacios y la geografía se tornen insignificantes a la hora acercar a quienes acceden al conocimiento, debe mirar hacia adentro, cuestionarse, escudriñarse y criticarse, sin engaños. Mucho se ha hablado sobre el tema, páginas y más página inundan los rotativos y editoriales, sin embargo todo cambia, menos el maestro. La escuela colombiana debe pintar con amor, en cada aula, en cada espacio escolar, las utopías, las visiones que acompañaran a cada niño hacia el futuro. Tal visión puede hacerse realidad, en la misma medida en que el maestro convierte sus clases en oportunidades para crecer, amar, y "desear” aprender. El " tranvía del deseo” por naturaleza humana es la lectura y su par, la escritura. Este proyecto, por derecho propiedad de los niños y jóvenes, pretende darle un vuelco a esa concepción de lectura como medio para ejercer "control” sobre todos los estudiantes, y quiere reclamar la naturaleza del mismo: el derecho a viajar, a soñar, a imaginar, a crear, a re-crear, a pintar, "todo” tal como nos fue heredado por nuestros más antiguos antepasados. PROYECTO "CLUB DE LECTURA Y ESCRITURA”, G-100, Biblioteca Caminante, nace de la necesidad de los niños y los jóvenes de "hablar, pensar, comunicar, imaginar, aprender, escribir, leer, viajar, amar, sentir, crear, soñar, compartir, vivir con plenitud, con temor ni dolor”, y se nutre de realidades socioculturales, escolares, y teóricas para implementar unas estrategias pedagógicas válidas para los propósitos aquí mencionados. Es necesario agregar el siguiente concepto del pensador Francés Pierre Theilhard de Chardin (1956), pues, de alguna manera, sus palabras permiten subrayar el sentido de este proyecto: "El pasado no se ha desvanecido, sino que subsiste; algo así como el recuerdo de un viaje, cuyas imágenes hemos dejado atrás en el tiempo, pero sigue existiendo en la memoria”; Un libro, un libro escrito constituye la memoria de algo que se queda atrás, y el leerlo se realiza un viaje y se vive el recuerdo de instantes pasados, es la mirada que observa lo de afuera que está adentro, las vivencias de los seres humanos haciendo historias de vida, particulares, colectivas, de un@, de un@s, de tod@s, hacia el futuro. Un libro nos permite ver hacia atrás, ahora, hacia el futuro. Nuestra Escuela. Nuestros estudiantes, los niños y niñas de este país reclaman el derecho a la memoria. Queda este Proyecto a disposición de quienes quieran entrar en la discusión: Nuestra Educación tiene pociones, si vuelve su mirada sobre el libro y, con él, la biblioteca escolar. Ahora hemos iniciado el viaje. 1. ELECCIÓN DEL TEMA Ante la preocupación de docentes, padres de familia y alumnos, por la carencia de estrategias que motiven al individuo por la práctica de la lectura y la escritura reflexiva sobre lo leído, surge la necesidad de la creación de un proyecto que dé cuenta de esta inquietud comunitaria y amplíe el horizonte cultural del grupo comprometido. El proyecto: Club de Lectura y Escritura, pretende ser la estrategia que facilite el encuentro con la lectura y la escuela. 1.1 CONTEXTO Ahora, la población infantil y juvenil que integra el general de discentes del colegio, de las zonas periféricas de las ciudades colombianas ha llegado a la escuela motivada por intereses prácticos: Dominar las operaciones básicas matemáticas, adquirir destrezas para descifrar escritos y expresarse en forma escrita para defenderse en las situaciones que sea necesario en la vida, y en muy pocos casos, para adquirir conocimientos o formarse como fundamento hacia el desarrollo de habilidades o potencialidades personales e incluso poder acceder a la educación superior. La lectura y la escritura como factores indispensables en el desarrollo escolar, el aprendizaje, la comprensión e interpretación de la realidad, no son vivenciados o tenidos en cuenta, pues son simples herramientas para ellos, prescripciones que da la escuela y que se deben cumplir. Por tanto, hablar de prácticas de lectura y escritura o vivenciar las actividades culturales que entrañan dimensiones estéticas o cultivo de la expresión de la belleza en las realizaciones del hombre, como la danza, el cine, la crítica literaria, el mundo de los escritores, etc., es vacuo en la visión del joven de esta institución, a excepción de algún inquieto que ha tenido acceso a experiencias significativas fuera del aula. Más significativo es aún, además del desinterés del padre de familia por estas prácticas tan importantes en la vida del hombre, a pesar de que apoyan verbalmente las iniciativas de formación o implementación de estrategias que induzcan a la práctica lectora, es la desidia, la apatía y la negligencia del docente para asumir con propiedad estas prácticas fundamentales para la asunción del ejercicio docente, para asumir los roles sociales que derivan de las relaciones que plantea la escuela, y desde luego, para asumir la vida con criterio desde la perspectiva profesional desde donde han decidido afrontar su historia personal. 1.2 DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA Leer y escribir, pareciera que fueran dos prácticas diferentes y sencillas, por su presencia normal en la escuela. Sin embargo, la realidad educativa es otra. El docente reconoce que la lectura y la escritura son dos fenómenos comunicativos que interactúan, se complementan y coexisten en la escuela como problema, ya que las prácticas pedagógicas (en el aula y fuera de ella) no han sido eficaces; hay deficiencia en los métodos y en las actividades. Pero tampoco el maestro se compromete en acciones correctivas o en reformular sus prácticas pedagógicas. La lectura potencia la capacidad para desarrollar ideas, interpretar la realidad, discernir la misma realidad; propicia el encuentro entre el lector y el conocimiento, adiestrándolo con información, conceptos, ideas nuevas, contradictorias, complementarias o complejas, para establecer juicios y construir la personalidad. Este factor, ausente en la comunidad educativa, se define como un elemento problemático para adelantar procesos educativos con propiedad, coherencia y pertinencia en la escuela. Así mismo, la habilidad escritural, como reflejo del acto interpretativo de la lectura, no ocurre en el ámbito escolar, sino como práctica obligada en el aula, como mediación para "el estudio”, ejercicio de memorización de conceptos y/o textos escritos. Formar niñ@s lectores, entusiasmar y contagiar a los niñ@s con el gusto y el placer de leer y escribir, es una práctica ajena a las rutinas escolares en la Institución. Por ende, las actividades complementarias que entraña un proyecto, como el " Club de la Lectura y de Escritura” , son desconocidas. Hablar de cine, estudiar y promover las experiencias con otros lenguajes; entender el lenguaje del cine, la pintura, la danza, etc., suenan inocuas, lejanas prácticas cercanas a la utopía. Es el vacío cultural, la descontextualización histórica y cultural de la escuela, la que preocupa, el problema que motiva a la creación del proyecto. 2. JUSTIFICACIÓN Crear un club de lectores para fortalecer y animar la enseñanza de la lectura y la escritura, para estudiantes de básica, es la estrategia más plausible con que se pretende dar solución a la problemática planteada. El club , en primera instancia busca reunir un grupo básico de lectores, denominado G - 100 Biblioteca Caminante. Será un grupo pionero cuya misión principal es leer; ésta práctica se ha de conseguir a través de una labor de concientización realizada por un agente coordinador, en este caso, el docente responsable del proyecto. ¿Por qué un club de lectores?. Porque el club reúne a sus miembros en intereses comunes. Las experiencias que la cotidianidad escolar no ofrece al joven o al mismo maestro, serán vivenciadas a partir de las necesidades formuladas por cada miembro durante las sesiones de socialización propias de la dinámica de G - 100 de lectores. El club de lectores para estudiantes de una Institución educativa y en general para la comunidad educativa institucional, es una ventana de oxigenación a las experiencias culturales desarrolladas dentro de la institución. El proyecto pretende posibilitar el acercamiento al libro, que es una de las tácticas más de válidas de ésta estrategia mediante la cual se quiere propiciar un acercamiento más entrañable y significativo entre el niñ@ y el libro, el niñ@ y el acto de escribir. La escuela necesita vivenciar experiencias nuevas alrededor de la " enseñanza” del Español y la Literatura y el club de lectores es la alternativa que propiciará la ampliación del universo cognitivo del alumno, al ofrecerle la opción de leer y escribir como prácticas renovadas en un ambiente de disfrute y vivencia lúdica. Se pretende responder a las limitaciones culturales de la escuela. Existe la convicción que a la fuerza no se forman los lectores, sino en el disfrute de ambientes que satisfagan necesidades y propicien el encuentro con el placer. Es un proyecto azaroso, pues no es fácil impulsar el leer o el escribir, como se quiere, de la noche a la mañana. La primera de las múltiples tareas que depara este proyecto, es la motivación. Hay que atraer a los potenciales adictos a la lectura no con la idea de convertirlos en descifradores de textos, sino como posibilitación para hallarnos a nosotros mismos, seres pensantes, reflexivos, críticos de la realidad y promotores del cambio que necesita nuestra nación y ser mejores que nosotros mismos. Es un compromiso institucional, familiar, personal. Con la creación de un Club de lectores y escritores, se hace necesario crear ambientes festivos, estimulantes para el encuentro entre el maestro y el alumno con la mediación del lenguaje. Así pues, el aprendizaje de una sintaxis, una gramática de la lengua materna en el área del Español, iría implícita en el acto placentero de leer y escribir. Como es de suponer, se beneficiarían las demás áreas del conocimiento que recibirían el beneficio del enriquecimiento del léxico, el dominio de las reglas de construcción de los discursos y, finalmente el acto de aprender tendría verdadero sentido mediante la confrontación de los saberes que exige la lectura. 3. OBJETIVOS 3.1 GENERAL Desarrollar actividades de promociónv referidas a la lectura y la producción escrita en la escuela y fuera de ella, que permitan implementar programas, planes, estrategias para inducir al hábito de estas dos competencias comunicativas. Analizar las distintas teorías yv la influencia del ámbito cultural en las posturas desde las cuales se ha abordado la enseñanza de la lectura y la escritura en la educación colombiana. 3.2 ESPECÍFICOS Reconocer la lectura y la escritura comov actividades propias de los seres humanos indispensables en la aprehensión del conocimiento. Promover la iniciativa de la creación de un club parav vivenciar la lectura y la escritura en un ambiente de disfrute del tiempo libre y oportunidad para compartir experiencias interculturales. Rescatarv información de otros medios y diseñar programas culturales que den cuenta de experiencias significativas alrededor de la lectura y la escritura.v Diseñar actividades que permitan disminuir la apatía hacia la lectura y la escritura. Diseñar un plan general de acciones que viabilicen lav implementación de estrategias como la creación del Club de Lectores G – 100- Biblioteca Caminante. 4. MARCO TEÓRICO - CONCEPTUAL 4.1 REVISIÓN HISTÓRICA 4.1.1 La Lectura en la Antigüedad Griega: Se puede afirmar que la Civilización Griega impuso, desde sus orígenes, la lectura "hacia adentro”, es decir, silenciosa, sólo para el lector. Para los helenos, la lectura, que se realizaba en forma silenciosa sobre una escritura continua, sin interrupciones, implicaba abordar grandes cantidades de texto. Esto facilitó la lectura rápida. Otra forma de lectura consistía en leer textos históricos en forma oral para luego discutirlos y encontrarles sus relaciones filosóficas y filológicas. Claro es suponer que eran muy pocos quienes tenían acceso a estas técnicas. 4.1.2 La Lectura en Roma Antigua: En la Roma de los primeros siglos, el uso de la escritura estaba circunscrita al cuerpo sacerdotal y a los grupos gentilicios, depositarios de los saberes fundamentales de la ciudad, el sacramental y el jurídico, de la medida del tiempo, del orden analítico de los acontecimientos: conocimientos que se encontraban recogidos en libros lintei (de tela de lino, en los cuales se conservaba fundamentalmente el saber sacramental) o en tabulae lignarias. Desde el aspecto más específico de la literatura de Roma, sus formas primitivas estaban relacionadas con el restringido círculo de la clase dirigente y con exigencias concretas de la vida social: prosa oratoria de estilo sobrio, mortuorum laudationes (loas, alabanzas a los difuntos), informes de magistratura y memorias de la ciudad escritas sin ornamento retórico alguno. En el 181 a.C. fueron encontrados los llamados «Libros de Numa», rollos de papiro envueltos en hojas de cedro. Estos rollos –según afirman estudiosos del tema- en parte eran griegos y de contenido filosófico-doctrinal, fueron quemados porque eran contrarios a la religión institucional; otra parte era latina y de iure pontificum («de derecho pontificio»). El fenómeno está relacionado con dos hechos de capital importancia y que connotan la cultura romana entre los últimos años del siglo III y de los inicios del siglo I a.C.: el nacimiento de una literatura latina basada en modelos griegos, y la llegada a Roma de bibliotecas completas griegas, provenientes de botines de guerra, en una época en la que cada vez eran más importantes las influencias helénicas, junto con la aparición de un maniático coleccionismo de objetos de producción griega. |
| Nuestra lengua Este es un espacio a través del cual se pretende orientar, pedagógicamente, sobre aspectos importantes de la lengua, relacionados con sus normas, errores frecuentes y uso correcto de la lengua castellana. Para ello, empezaremos con lecciones sencillas y elementales: La lengua castellana, como cualquier lengua flexible, se estructura a partir de cuatro grandes pilares: .Fonético .Sintáctico .Morfológico .Semántico Hemos de considerar que desde la fonética se estudia el sonido material de la lengua. Dicción, vocalización, entonación, etc. La sintaxis, por su lado, estudia las relaciones que se dan en el lenguaje para determinar su sentido en cuanto a su cohesión y coherencia. La morfología, a su vez, se encarga del estudio de la forma en el lenguaje, de las diferentes maneras en que el lenguaje adquiere funciones dentro del hecho comunicativo:función nombre, adjetivo, preposición, artículo, demostrativo, pronombre, adverbio, verbo, etc. La semántica, es la rama de la lengua, cuya función es estudiar el sentido mismno del lenguaje, la significación. Por ello, vamos avanzando en estos primeros pasos, anunciando que la lengua castellana, para su realización, cuenta con un alfabeto integrado por veintiocho grafemas o representaciones gráficas de sonidos articulados; de estos, sólo veinticuatro son fonemas, es decir, sonidos concretos y reales de la realización del lenguaje. De los veinticuatro, diecinueve sonidos son consonánticos y cinco son vocálicos. Cada fonema puede a su vez ser estudiado en particular desde dos perspectivas: el punto de articulación y el modo de articulación. |
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